Oeste: un paraíso frágil
La vasta meseta tibetana Qinghai, un reino congelado y uno de los lugares para vivir más extremos de la tierra, sobrevivir aquí requiere resistencia. En sus 2,5 millones de kilómetros cuadrados, toda forma de vida está interconectada y cuidadosamente equilibrada. El viejo respeto del hombre por la naturaleza, tiene la clave de la supervivencia en el techo del mundo. Domina el oeste de China y es un lugar único en la Tierra, sus pastizales son de los más grandes del planeta y cuenta con alguna de las montañas más altas y la mayor reserva de agua dulce después de los polos. Un vasto ecosistema de importancia mundial. Sin embargo, a pesar de su tamaño, la vida en ella es frágil y necesita protección. Actualmente, las antiguas creencias y la China moderna, están trabajando juntas para conservar la ecología única de esta región.
Gratis
30 noviembre 2022